Una simple carta

Estoy caminando rumbo a ser productivo.

Las múltiples almas están a mi alrededor. 

Vuelvo a esta rutina de demostrar que puedo con el puesto, ¿dónde quedó el creer en mí?

¿Mí nombre si tiene un peso?

Soy un simple ser humano, no tengo nada de extraordinario. Me suena mejor ser un inexperto.

Todo entorna una rutina exhaustiva.

Estoy en esto creyendo que puedo con todo, ¿tengo permiso de no seguir con todo?

Soy un simple niño con cara de adulto, nadie me advirtió de lo cansado que es creerte a ti mismo como un adulto.

La historia es corta, casi veintiún años tengo.

Estoy mandando muchas cosas al baúl, estoy cargando con todo sin necesidad de cargarlo.

Me siento genial, pero llega uno que no sabe lo que es creerte menos en un mundo superficial y tira a la basura lo que estoy trabajando.

Suspiro, respiro aire y me relajo. 

La vida la estoy haciendo como yo quiero, nadie va venir a decirme que me tengo que bajar del barco.

No soy responsable de una forma idónea de creer que así son las cosas, si la materia misma se transforma, ¿por qué lo humano no?

Estoy solo, y lo acepto.

Nada me hará sentir lo mundano de ser humano, ya no sé si eso es real. Estoy trabajando en ser humano y ya.

Entre creer y ser está un abismo de direcciones errroneas.

Estoy cansado a este lapso de tiempo, me estoy muriendo en un cambio que ahora pienso si es obligatorio llevarlo acabo.

Tomé el aire entre mis pulmones y pensé en lo bonito que es amar, lo ridículamente inocente que es amar.

Mi vida está tomando forma, pero ser amorfo está bien.

No culmina esta forma de ver las cosas, tengo que contemplar el vacío. No hay otra opción.

Estoy sentado en un baño, deseando que la vida me tome de la mano y me lleve por un buen camino, que mi furia se vaya y que mis ojos vean lo que mi corazón siente, que mi voz diga lo que mi cerebro piensa.

Nada es igual que cuando tenía diez, todo cambió, yo cambié y mí forma de verte también.

Esto es una carta, sin destino ni partida.

Es una simple carta.


Jonathan Jesse 

Comentarios

--------------------------------------------------------------------------------

Clóset

El chico sin rostro

Cempasúchil